‘La civil’ de Teodora Ana Mihai, la búsqueda de una hija

Laura le pinta los labios a Cielo, su madre; después sale a la calle sin arreglar su cuarto ni darle de comer a su mascota. Es la última vez que Cielo la ve. 

 

Secuestrada por un cartel del norte del país, Laura se convierte en misterio, angustia y motivo para la cruzada de Cielo, que de modesta ama de casa se transforma en vigilante y testigo de un universo criminal atroz, que se ha infiltrado en la convivencia y la cotidianidad de muchas comunidades del país.

 

La civil, primera obra de ficción de Teodora Ana Mihai, surge de los testimonios que la directora rumana obtuvo de Miriam Rodríguez, una mujer de Tamaulipas a quien le secuestraron a su hija y que logró llevar a prisión a varios de sus plagiarios, hasta que fue asesinada el 10 de mayo de 2017. 

 

Cielo, recreación libre de Miriam, es interpretada por Arcelia Ramírez, en el que podría ser el mejor papel de su carrera. La civil participó en la sección Un certain regard del 74 Festival de Cannes y le mereció el Premio Courage, además de una ovación de ocho minutos para su protagonista. La película fue rodada en Durango, en tiempos de pandemia. 

 

Ahora, La civil se estrena en salas mexicanas. Y su directora Teodora Ana Mihai platica con nosotros sobre esta dura historia de crimen y ausencias, pero también de justicia y resistencia. 

 

Sé que La civil surge a partir de tu contacto con Miriam Rodríguez, una mujer que vivió situaciones similares a las de Cielo, la protagonista. ¿Cómo conociste a Miriam y cuáles fueron tus motivaciones para hacer esta película?

Desde hace mucho tiempo vengo a México, tengo muchos conocidos acá. En uno de mis viajes, en 2012, mis amigos empezaron a decirme: “mejor regresa a tu casa antes de las siete de la tarde por motivos de seguridad”. Esa realidad me golpeó muy fuerte, ahí me di cuenta que la situación había cambiado mucho.

Me puse a pensar cómo debe ser crecer en este ambiente y así nació el proyecto. Me prometí investigar sobre el tema de las desapariciones pero primero tenía que terminar mi primera película, Waiting for August, que habla sobre Rumanía, mi país natal.

Una vez que terminé esa película tuve la oportunidad de conocer a la señora Miriam Rodriguez. Este encuentro cambió mi idea de contar una historia desde el punto de vista de los niños y adolescentes. Recuerdo que al principio de la conversación Miriam me dijo: “cada mañana abro los ojos y lo que pienso es en matar o morirme”. Esas palabras fueron un golpe durísimo en el estómago, me di cuenta que la violencia de sus palabras no concordaba con su físico, era una mujer que podría ser mi mamá. Necesitaba saber y entender lo que había sucedido en su vida.

Empecé a hacer un documental pero me di cuenta bastante rápido que no era la mejor idea, así que decidimos escribir una ficción inspirada en lo que nos había contado. El guión lo escribí en colaboración con el escritor mexicano Habacuc Antonio de Rosario.

 

La civil, Dir. Teodora Ana Mihai

 

La civil denuncia las desapariciones forzadas en México desde el punto de vista de una madre, lo cual lo hace mucho más desgarrador; pero también recurre a elementos de género interesantes, como el thriller o el cine noir. ¿Cómo armaron la historia para que tuviera estas dos condiciones, la denuncia y el thriller? 

Queríamos que la película llegara al público y fue un reto hacer una combinación entre una película de autor con elementos que pertenecen a un cine más popular.

Yo soy narradora y conozco bien mi lugar en el mundo, no soy periodista ni militante, me dedicó a contar historias y busco conmover con ellas. Elijo temas que me conmueven e intento generar el mismo sentimiento en el público, a partir de ahí cada espectador tiene el poder, y quizá algunos lo ven como un deber, de hacer su pequeña contribución y cambiar un poco su mentalidad, porque de hecho la película no propone respuestas, sólo lanza muchas preguntas.

 

 

 

Mucho del peso de la película recae en la extraordinaria interpretación de Arcelia Ramírez, me gusta su transición de una ama de casa modesta a una mujer con fortaleza para encarar la búsqueda de su  hija. ¿Cómo construyeron el personaje de Cielo?

Fue un proceso retador por varios motivo. Una de las mayores complicaciones fue el COVID-19, que no me permitía viajar a México, así que empezamos las primeras pláticas por Skype y Zoom, hasta que finalmente logré viajar y empezamos a trabajar de forma presencial, dos meses antes de la grabación.

Nos reuniamos por muchas horas para trabajar en el guión y platicarlo detalladamente, sobre todo la psicología de Cielo y el desarrollo de su personaje.

Arcelia tuvo sus propios métodos para prepararse, yo no le compartí lo que había grabado con la señora Miriam porque quería darle la libertad de completar al personaje y pensé que si veía el material grabado iba a influir en su interpretación.

Pero fue un proceso lindísimo, sabía que necesitaba a una actriz que se entregara al 200% y Arcelia Ramírez realmente carga la película, su energía está en cada escena.

No quiero hablar de moralejas, pero es interesante porque descubres que no hay blanco y negro en la película, todos los personajes tienen matices grisaceos porque la realidad es bien compleja y cuando la violencia nos toca, de cierta forma nos involucra en este círculo vicioso.

 

Eréndira Núñez me platicó del reto que fue filmar La civil en Durango en tiempos de pandemia. Desde tu punto de vista, ¿cómo fue ese rodaje ? 

Antes de empezar el proceso yo tuve que convencer a mis productores para hacerlo, en ese momento no sabíamos si llegarian las vacunas y mucho menos cómo iba a ser el futuro. Pero yo necesitaba sacar esa película, estuve trabajando en ella desde 2015, era un tema que estaba cargando desde hace muchísimo tiempo y sentía que ya necesitaba ver la luz.

Decidimos aventarnos, esperando que nadie se enfermara. Ahí Arcelia tuvo una disciplina impresionante, se cuidaba muchísimo y siempre estaba muy concentrada. Sabía que la necesitábamos en cada escena y cada día de rodaje, y si ella se enfermaba significaba parar dos semanas, eso hubiera sido trágico para la producción. En esas condiciones concentrarse no es fácil. 

Rodar una película no es fácil, en estas condiciones es peor, pero qué bueno que el universo estuvo con nosotros y no nos pasó nada.

 

¿Tendrías interés en rescatar las grabaciones que hiciste con Miriam para otra película?

Estuve pensando en eso. De cierta manera enterré el material porque manejaba información delicada y no quería poner a nadie en problemas. La señora Miriam fue asesinada pero también hay otras personas involucradas, entonces no he encontrado todavía la respuesta. 

La señora ya no tiene voz, por esa vía le podría dar voz otra vez, pero también La civil le da esa voz, por eso hicimos la película de esa manera. Entonces vamos viendo. 


 

La civil (Bélgica, Rumania, México, 2019). Directora: Teodora Ana Mihai. Guión: Habacuc Antonio de Rosario y Teodora Ana Mihai. Fotografía: Marius Panduru. Editor: Alain Dessauvage. Productora: Sandra Paredes. Diseño de Producción: Claudio Ramirez Castelli. Diseño de Vestuario: Bertha Romero. Maquillaje: Alfredo Garcia. Sonido: Manuel Danoy, Federico González Jordán, Valérie Le Docte. Música: Jean-Stephane Garbe. Casting: Viridiana Olvera. Productor: Hans Everaert. Co-productores Bélgica: Jean-Pierre & Luc Dardenne, Delphine Tomson, Teodora Ana Mihai. Co-productores Rumania: Cristian Mungiu, Tudor Reu. Co-productores México: Michel Franco, Eréndira Núñez Larios. Productores asociados: Philippe Logie, Arlette Zylberberg. Reparto: Arcelia Ramírez, Álvaro Guerrero, Ayelén Muzo, Jorge A. Jiménez, Daniel García, Eligio Meléndez, Alessandra Goñi, Mónica del Carmen.