‘Viaje de negocios’, de Gerardo Coello Escalante: el conflicto de los tenis rojos

Regresó tu papá de un viaje de negocios y te trajo unos tenis increíbles, escandalosamente rojos, con llamas espectaculares que parecen incendiar cada paso. Unos tenis que obvio hay que presumir. El conflicto inicia cuando otro niño del colegio lleva exactamente los mismos tenis. Y cuando intuyes que no es lo único que comparten. 

Viaje de negocios, cortometraje de Gerardo Coello Escalante, arranca como una cándida historia de niños, que se va poblando de sutilezas y subtextos, hasta insinuar conflictos más amplios. Se trata de una historia que, además, significó una experiencia importante para todo un grupo de niñas y niñas que colaboraron en el proyecto. 

Viaje de negocios tuvo su estreno en Sundance de 2024, el mismo año mereció el premio a Mejor Guion en Shorts México y estuvo considerado para competir en los premios Oscar de la Academia y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos. Desde el 12 de junio está disponible en la cuenta de Thumper Films de YouTube. 

Platicamos con Gerardo Coello Escalante sobre este ejercicio que, desde su candidez, propone los poros, las fisuras, de la vida en familia y del crecimiento. 

 

Viaje de negocios, dir. Gerardo Coello Escalante

 

En esta historia hay dos niños, dos pares de tenis y una historia oscura entre todo eso, ¿cómo va apareciendo esta historia?

Son anécdotas, cosas que uno escucha de oídas, pero la historia empezó por la obsesión con la ropa de Estados Unidos, algo con lo que crecí. Ocurrió antes de que yo supiera qué eran las clases sociales, o lo que valía el dinero. Y es hablar de este mundo de los años 2000, donde la proximidad a Estados Unidos era tan valiosa, y causaba un gran impacto cultural su ropa, sus películas, sus libros, sus gadgets. Es una historia sobre malinchismo y la obsesión con lo de afuera.

 

Pero Viaje de negocios es como un géiser del que sólo muestras la punta, debajo hay otra historia: cuando descubrimos que nuestra familia es porosa o incierta, que deja de ser un territorio seguro.

Me interesa explorar este momento del crecimiento en el que idolatramos a nuestros padres, pero después descubrimos que no todo es como pensamos: tal vez no son tan perfectos, tal vez no siempre tienen la razón, tal vez no dicen la verdad. 

 

Justo por el tema que subyace bajo la anécdota me dejas pensando, ¿Viaje de negocios es una historia sobre niños o para niños?

Lo pueden ver los niños, a mí me importaba que fuera amigable con ellos. De hecho, nuestras mejores proyecciones han sido en escuelas, lo proyectamos en una secundaria de Park City y fue una gran proyección, todos los niños tenían algo con lo que se identificaban. Los mismos actores lo entendieron en la filmación.

 

Uno imagina que los relatos infantiles deben ser cándidos; extraña que un relato infantil aborde temas que parecerían de adultos. 

El niño no tiene el mismo filtro que el adulto. En la mayoría de los casos, el adulto tomará una reacción distinta, una distancia, va a premeditar sus acciones. Un niño no tiene este filtro tan desarrollado y por eso vemos acciones de venganza, como la que sucede en el corto: no está muy bien planeada, pero es la manera en la que se expresan estas emociones; es lo que más me interesaba y por eso funciona contarla desde los niños.

 

Viaje de negocios, dir, Gerardo Coello Escalante

 

¿Cómo conformaste tu elenco?

Fue un proceso de casting dentro de la escuela, invitamos a todos los estudiantes a participar, recibíamos videos en donde se presentaban y me contaban una historia. El primer video que recibimos fue de Pablito, el chico de los lentes, que de inmediato se quedó. La búsqueda por Daniel, el protagonista, fue más larga, porque no muchos niños con la sensibilidad que yo buscaba. Trabajamos con un director de casting maravilloso, Luis Ángel Vázquez, que expandió esta búsqueda a otras escuelas y otras agencias, y fue pura suerte que Rodrigo Mota terminara quedándose con el papel principal, fue de los últimos en presentar casting.

Fue esencial tener a Luis Ángel manejando el casting. Creo que algo importante, en especial trabajando con niños, es la empatía y la conexión que puedes generar con ellos. 

 

¿Cómo trabajaste con tu elenco?

Era su primera vez actuando y en pantalla, para mí era esencial que fuera una buena experiencia. Sabemos que el mundo del cine puede ser muy duro; hay tensiones, abusos de horas; para mí era esencial que los niños tuvieran un gran recuerdo. Hicimos lo que estaba en nuestras manos para que se sintieran cómodos y las familias se sintieran incluidas. Los niños se sentían con gran dedicación al proyecto, se volvieron amigos entre sí. 

Esto me gusta en mis proyectos: generar este sentido de comunidad, porque te lleva a un mejor resultado. 

 

Para tratarse de un cortometraje es una superproducción, con tres personajes principales, pero toda una escuela a tu servicio. La Benjamín Franklin, si no me equivoco.

La escuela es en el sur de la Ciudad de México. Le cambiamos el nombre, pero fue a la que yo fui en toda mi vida. Me acerqué con ellos a pedirles permiso y me dieron todas las facilidades para filmar. Incluimos a niños del instituto, pues había mucha gente de la comunidad interesada en ver cómo se filma, la idea era que ellos lo disfrutaran también. Con nuestro primer asistente de dirección y un gran equipo de amigos entreteníamos los niños y jugábamos con ellos.

 

Ya tienes un camino importante como asistente de dirección, en producciones como Shiva Baby (Seligman, 20), o Bardo, falsa crónica de unas cuentas verdades (González Iñárritu, 22). ¿Cómo ha sido ese aprendizaje?

Es estar picando piedra, pero con humildad, para aprender. Tengo una larga carrera de asistente de dirección, he participado en varias películas, y a cada una de ellas la tomé como si fuera mi propia película, como una oportunidad para aprender: aprender de directores, directoras, de las escenas que estábamos filmando, y desmitificar la gran película o el gran set. Tanto yo como Amandine Thomas, mi pareja creativa, teníamos este callo de haber trabajado tanto en la industria, sabíamos resolver problemas y mantener todo bien. 

Me siento muy agradecido, porque he aprendido de grandes directores y directoras, he tenido la oportunidad de estar en sus sets, viendo cómo trabaja cada escena, cada plano, y ahora que hago mi proyecto sé cómo acercarme a estas situaciones. 

 

Conoce el cortometraje Viaje de negocios de Gerardo Coello Escalante en la página de YouTube de Thumper Films. 

Viaje de negocios (México, 2024). Director: Gerardo Coello Escalante. Guion: Gerardo Coello Escalante, Amandine Thomas. Productora creativa: Amandine Thomas. Productores: Nahim Abuxapqui, Rodrigo Solano y Gerardo Coello Escalante. Cinefotografía: Cody Powers. Edición: Amandine Thomas y Gerardo Coello Escalante. Casting: Luis Ángel Vázquez. Diseño de sonido:  José Miguel Enríquez y Daniela López Guerrero. Efectos visuales: Erick Alcaraz. Animación: Zack Handler. Reparto: Rodrigo Mota, Pablo Torres, Lila Urbina, Gerardo Saldaña, Elías Bissu, Diana Rodríguez, Juan Edgardo Catalán.